martes, 20 de enero de 2009

Hoy

Nada puede sacarme de esta sensación de vacío que yo misma genero con cada respuesta errónea y molesta que sale de mi boca ante la gente a la que pretendo querer. Cada nueva experiencia y cada cara nueva, me impide dejar simplemente que todo fluya y necesito desde mi alma, poner barreras y filtro que son imposibles de pasar. Todo puede ser en vano, si no me dejo ver tal cual soy, esa que siente y anhela y desea cosas simples y sencillas.
Pero no, muy a mi pesar me muestro fría y distante, terca y soberbia, y muy pero muy fuerte... pero para q? A quién le tengo que demostrar que no soy como las demás, si en realidad lo soy? Qué ventaja tiene diferenciarme de manera cruel y negativa, con la oscuridad rondando mi cuerpo y mis palabras?. Eso ya no tiene que ver con mi vida, que de apoco se lleno de cosas positivas y materiales que se hicieron a fuerza de sudor y lágrimas.
Por qué reniego de mi veta sutil y femenina? Por qué niego que crecí y que ya me cansan ciertas pautas que yo misma me impuse para relacionarme con los demás?
No quiero ser esa que no soy, suena complicado pero es más claro de lo q parece (justo como yo).
Manos llenas de una nada que construí, por que tenerlo todo y no poder compartirlo es como no tenerlo; a golpes lo aprendí.
No quiero seguir negando lo que siento, hablando a destiempo y sugiriendo que nada me pasa, cuando las lágrimas salen solas y no sé como ocultarlas ante las personas de las que dependo para comprobar que puedo cambiar.
Extremos de una cuerda a punto de romperse, desgastada por un personaje que no quiere verse expuesto ante nadie, y lo único que logra es que le vuelvan la cara y ni siquiera intenten entenderlo. Sombras de un mundo inventado casi efímero pero que no se disuelve ante mi conciencia de él.

Nueva vieja historia

El nudo en el pecho no me deja pensar, porque otra vez no fui yo, otra vez me guardo lo mejor de mí. A caso nunca podré soltar la llama y prenderme ante la pasión?. A caso jamás volveré a mirar con los ojos vidriosos como lo ví a él? Me anuló, me dejó sin aliento ni ganas de confiar. Nadie llega a ser tratado como un él, nadie logra pasar los filtros que mi alma impone con bravura e ironía desmedida.
Quiero que vea solo una de estas lágrimas contenidas por tanto tiempo, y descubra lo sincero de mi pesar. Con esa sola lágrima yo lograría liberarme y poner al descubierto que no soy lo que creé, sino que soy solo un papel en blanco, dispuesto a contar una nueva vieja historia.

lunes, 19 de enero de 2009

Lunes otra vez

La ansiedad que provoca tu ausencia es un ápice de melancolía, comparada con lo que genera tu presencia. Proque estás pero divagas entre la llama apagada de ese momento de desvío y el orgullo de saberte adorado.
Sos cada palabra que digo en el momento menos indicado, sos cada uno de mis enojos y desaciertos en los que me enredo sin salida, hasta que otra vez te vas.
Una mano, una caricia esquiva y una mirada que dice demasiado, más de lo que puedo soportar. Intuición o deseo oculto, ya no se que es lo que me lleva a leerte tan claramente, porque no se si esa claridad significa lo que tus silencios dicen.
Tal vez quiero tanto superar esa mala espina, que uso tu ímpetu momentáneo para tapar el gran vacío que dejó. Quizas tengo que dejar de estar alerta y cuando menos lo espere, tu hombro estará dispuesto para mi.
Todo se mezcla entre risas y extraños suspiros. Entre reproches infundados, y palabras dichas al azar, para tapar las que realmenete deberían decirse.